lunes, 21 de junio de 2010

¿Sabes algo del fin del mundo?

¡Que pregunta!. Bueno, aquí tienes algo para decir si te la hacen. claro que dependiendo de que lado estés.

En cuestiones del fin del mundo, la necesidad de conversión no es algo que suela entrar dentro del esquema mental del común de los mortales; pareciera preferible darle mayor crédito a lo que dice la New Age, las «profecías» mayas o las películas de Hollywood, que a lo que Dios mismo ha revelado a través de las Sagradas Escrituras.


En los últimos meses se ha puesto muy de moda el rescate de la «profecía» maya sobre el 21 de diciembre de 2012. Al parecer, el calendario de esa cultura aborigen americana llegaría nada más hasta la citada fecha, lo cual sería un vaticinio —según el parecer de algunas gentes— de que ese día se acabará el planeta o, al menos, la vida en él.

Pero no todos concuerdan en lo que significa esa marca del calendario. Para algunos, lo que indica es simplemente el fin del quinto mundo maya —equivalente al «quinto sol» de los aztecas—. Para otros es la llegada a nivel mundial de una «nueva era cósmica» de tolerancia y paz.

Mayas estilo New Age

Esta última postura, de clarísimas raíces New Age (Nueva Era), y muy promocionada en internet por sitios web de panteístas, hechiceros, brujos, adivinos y astrólogos, pretende que son siete las «profecías» mayas sobre el año 2012, y les da una terminología de lo más moderno y alejada del lenguaje indígena: «alineación en cruz cósmica», «lado negativo», «aceleración de la actividad solar por el aumento de vibración», «nueva realidad de armonía», «agentes de cambio», «amanecer de la galaxia», «estado de paz interior», «energía del rayo transmitido», «frecuencia de vibración alta», «nuevo ser en el orden genético», «reintegración de las conciencias individuales», «gobierno mundial y armónico», «orden universal», «sistema inmunológico», «aprendizaje del contraste inverso», «contraste armónico», «conciencia evolutiva», etc.

Lo más importante para los seguidores de la Nueva Era es que la «séptima profecía» maya no marque la llegada del fin del mundo, sino sólo de «esta civilización humana»; así, el cumplimiento de la «profecía» no tendría por qué significar ninguna calamidad, sino más bien el inicio de una «nueva conciencia cósmica».

Catástrofes previas

Al pensamiento le resulta difícil no asociar el fin del mundo con una serie previa de acontecimientos catastróficos, pues el propio Jesucristo lo reveló así: «Habrá señales prodigiosas en el sol, en la luna y en las estrellas. En la Tierra las naciones se llenarán de angustia y de miedo por el estruendo de las olas del mar; la gente morirá de terror y de angustiosa espera por las cosas que vendrán sobre el mundo, pues hasta las estrellas se bambolearán. Entonces verán venir al Hijo del Hombre en una nube, con gran poder y majestad» (Lc 21,25-27). Pero, una vez aceptada esta verdad revelada en las Sagradas Escrituras, la actitud entre cristianos y paganos se vuelve diametralmente opuesta:

¡Ven, Señor Jesús!

Para el cristiano la segunda venida de Cristo y todo lo que ello implica es, a todas luces, más deseable que cualquier tranquilidad terrena. Por algo el Apocalipsis culmina con el Maranathá apremiante: «El Espíritu y la Esposa [la Iglesia] dicen Ven’. Que el que escucha diga también ‘Ven’ (...). El que da fe de estas palabras dice: ‘Sí, vengo pronto’. Amén. Ven, Señor Jesús» (Ap. 22, 17. 20).

¡Que no se acabe! ¡Que no se acabe!

Para el pagano, en cambio, no hay nada más deseable que la vida cómoda y divertida de acá abajo, sin compromiso alguno de conversión; por tanto, no puede haber mayor tragedia, a su entender, que el final de todo ello. Esto quedó bien reflejado, por ejemplo, en la película La séptima profecía, rodada en 1988, en la cual la protagonista (Demi Moore) debe hacer todo lo posible por evitar la llegada del indeseable día del Juicio Final. Lo curioso es que cuando se exhibió en las salas de cine se corrió la voz de que esa película «sí se basaba en la Biblia», y el espectador quedaba muy satisfecho con el desenlace, feliz, de que el mundo no se hubiera acabado.

Últimamente se produjo el estreno de otra cinta sobre el fin del mundo. Se trata de 2012, del cineasta alemán Roland Emmerich, que pretende apoyarse en la «profecía» maya del 21 de diciembre de 2012. Al parecer, la mejor gracia de la película son los efectos especiales, que muestran la destrucción de la ciudad estadounidense de Los Ángeles por un terremoto de 10.5 grados en la escala de Richter, y la del también estadounidense parque Yellowstone, gracias a una enorme erupción..

Nadie sabe el día

A fin de cuentas, muy en el fondo, la gente intuye la verdad: que, se quiera o no se quiera, tarde o temprano el mundo se acabará. ¿Cuándo? Muchos, a lo largo de la historia, han propuesto fechas y ninguno le ha atinado. Por algo advierte el Señor: «Nadie conoce el día ni la hora. Ni los ángeles del Cielo, ni el Hijo; solamente el Padre» (Mc 13, 32).

Al no conocer, pues, si mañana, dentro de un mes, dentro de dos años, dentro de cien o dentro de mil el mundo se acaba, el hombre debería meditar y prepararse de alguna manera; después de todo, esa misma preparación habrá de servirle para el momento de su muerte.

¿Qué harías en la última hora?

Pero las cosas no parecen ir por ese camino. En una encuesta realizada en Gran Bretaña por la empresa Ziji Publishing en octubre de 2007, se le preguntó a la gente qué haría en los últimos 60 minutos de su vida si supiera que un asteroide se fuera a estrellar contra la Tierra poniendo fin a la vida en el planeta. Las respuestas demuestran que la esperanza en la vida futura está más bien fuera del pensamiento de las mayorías:

+ El 54% respondió que le gustaría pasar ese tiempo con sus seres queridos o hablando con ellos por teléfono;

+ El 13% dijo que se sentaría, aceptaría lo inevitable y se serviría una copa de champaña;

+ El 9% dijo que le gustaría emplear esa hora en tener relaciones sexuales:

+ Sólo un 3% dijo que lo dedicaría a la oración.

(Autor: Diana R. Garcí¬a Bayardo)

(Fuente: www.elobservadorenlinea.com)

viernes, 4 de junio de 2010

Cuando leí lo que sigue en el blog español "Predicatori Veritatis", no pude menos que trasladar esa realidad a lo que ocurre o se pretende que ocurra en mi país. La búsqueda descontrolada de imponer el pensamiento y el método de la minoría, asistido por un constante bombardeo sobre las conciencias de la masa para que acepten  los hechos que aquí se explican, como una defensa de las libertades individuales y la preservación de pretendidos derechos humanos.

Adoctrinamiento putero
En primer, debo pedir disculpas por el título del artículo. Quizá haya adjetivos más suaves que permitan explicar la realidad, pero la contundecia de los hechos requiere una descripción sintética a la vez que clarificadora. Y es que, aunque la crisis económica sea la principal preocupación de la sociedad, no podemos olvidar que hay otros muchos asuntos que son, muchos de ellos, causa principal de la degradación moral del ser humano que ha llevado, en ultima instancia, a la actual situación de incertidumbre. A nadie se le escapa que el gobierno del botarate Rodriguez Zapatero inició, desde el mismo momento de su toma de posesión hace 6 años, un proceso de transformación de la sociedad para reducirla moralmente a la nada. Y uno de los pilares fundamentales de esa destrucción social ha sido y es la educación sexual.

Según podemos ver en este video realizado por Profesionales por la Ética, "la Ley de Salud Sexual y Reproductiva y de Interrupción Voluntaria del Embarazo, que entrará en vigor el próximo 5 de julio, llevará a las escuelas españolas lo que la propia norma denomina una educación sexual adecuada. Se tratará, entre otros objetivos, de que los jóvenes aprendan a reconocer y aceptar la diversidad sexual, prevengan enfermedades e infecciones de transmisión sexual y embarazos no planificados". El citado video recoge imagenes de las guías sobre la materia elaboradas por los Ministerios de Educación y Sanidad y las Consejerias de Sanidad de Andalucía y Cataluña, quedando probado que dicho adoctrinamiento sexual se desarrolla a través de todos los niveles de la Administración.

A título de ejemplo, en el video aparece el indice de uno de los citados folletos con contenidos como la masturbación, fantasías sexuales, deseo, excitación y orgasmo, homosexualidad, heterosexualidad, la primera vez, las primeras veces, relaciones sexuales. Asimismo, se incorporan viñetas que enseñan a los jóvenes a ponerse un preservativo femenino, dibujos y explicaciones de cómo detectar sus zonas erógenas o como tener relaciones sexuales completas. Es decir, adoctrinamiento putero. Un adoctrinamiento basado en una educación abortista, totalmente ideologizada y deshumanizada y que antepone el propio placer y la autosatisfación sin ningún tipo de límite. En esas guías se banalizan totalmente las relaciones sexuales, dando lo mismo ocho que ochenta, hombre que mujer.

Desde esa clase política, podrida moralmente, se adoctrina de esta forma a los niños en los colegios. Una educación que corresponde constitucionalmente y naturalmente a los padres, ha sido adoptada por el Estado como vía para difundir su ideología abyecta, otorgando rango de normalidad a conductas que poco tienen que ver con el desarrollo natural del sexo y que, en cualquier caso, corresponde a la familia la inculcación de las mismas. Como ejemplo de la situación creada, en este video que recoge el blog Crux et Gladius, podemos ver cómo puede acabar la lucha de una familia norteamericana por evitar que adoctrinen a su hijo en la escuela en cuanto al matrimonio homosexual.

La verdad es que buscar explicación para la obsesión del progrerio mundial con adoctrinar sexualmente a los niños sólo puede llevar a conclusiones aberrantes. El respeto a las creencias de cada persona debería ser lo que guíe el tratamiento de las relaciones sexuales y dejar en manos de los padres la educación de los hijos al respecto. La insistencia por parte de los gobernantes de querer difundir ideologías dañinas para el ser humano, como la de genero o el homosexualismo militante, recuerda procedimientos de regímenes pasados que quizá no tengan tanta diferencia con lo que se está haciendo ahora. El lavado de cerebro de las nuevas generaciones comienza desde su más tierna infancia, inculcandoles desde el primer momento que el sexo es algo banal y que pueden hacer uso de él a su antojo.

Tanto si se es creyente como si no, no se debe permitir que los gobiernos sigan adoctrinando de manera tan descarada a los hijos. La escuela no se puede convertir en una especia de correa de transmisión de la concepción putera de la sociedad y sólo los padres pueden revertir esta situación. Sé que es duro, dificil y que los apoyos sociales son mínimos, pero no podemos permitir que las nuevas generaciones salgan del colegio sin saber casi ni sumar pero hechos unos expertos en el sexo anal. Recuerden Sodoma y Gomorra y cómo acabó. Reitero mis disculpas por el uso de ese adjetivo malsonante, pero creo que hay que llamar a las cosas por su nombre y, claro está, de un stablishment progre putero, sólo se puede esperar más de lo mismo.

(Fuente Predicatori Veritatis)

jueves, 3 de junio de 2010

Acertadas palabras de Benedicto XVI

En la apertura del pasado Sínodo sobre la Eucaristía, Benedicto XVI hizo una espléndida homilia con un diagnóstico certero sobre el mundo moderno: “queremos poseer el mundo de manera ilimitada, Dios nos estorba y hacemos de Él una simple frase devota, o lo desterramos de la vida pública… Pero donde el hombre se convierte en el único dueño del mundo y en propietario de sí mismo, no puede haber justicia”. Varios medios han tildado esta afirmación, tan evangélica y tan realista, de apocalíptica, cuando se trata de una lectura inteligente de la historia del mundo, y especialmente del siglo pasado y lo que venimos transcuriendo del presente.  Es una advertencia especialmente adecuada para esta hora que nos toca vivir, aunque provoque sarpullido a los bienpensantes de turno.
(Fuente: Conoceréis de verdad.org)
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...